Una pequeña nota sobre los “buitres”
Eduardo de la Serna
Dentro de las aves rapaces, hay
un sub-grupo, los falconiformes a la que pertenece el conjunto llamado “buitres”.
Los hay de todo tipo y en casi todas partes. En Argentina el buitre más
conocido es el cóndor. Su característica morfológica es la falta de plumaje en
la cabeza, quizás por su estilo de alimentación lo que facilita meter la cabeza
entre los animales muertos. Son fundamentales en el equilibrio ecológico ya que
combaten las infecciones que podrían producir los cadáveres y la difusión de
enfermedades. Majestuosos al volar a grandes alturas pueden, gracias a su muy
buena visión, detectar animales muertos a lo lejos recorriendo enormes
distancias. Basta con ver un cóndor y su belleza – particularmente en vuelo – como
para preguntarse si realmente es sensato a un animal tan bello atribuirle comportamientos
despreciables como los que se aluden al hablar de los detestables y abominables
“fondos”.
De vuelo bajo, casi rasante, con
la mirada miope del dios dinero, sin ninguna majestuosidad salvo para sus
lacayos, contaminando todo lo que los rodea, enfermando el mundo, deformando el
corazón de la humanidad, en especial perjudicando a los pobres. Mirando esto,
me pregunto si no sería más sensato llamarlos “fondos vinchuca”. La vinchuca es
un insecto, de la familia de las “chinches”. Es hematófago, es decir que se
alimenta de sangre. Chupa sangre y así puede vivir; pero no solamente esto: al
picar a una persona cuando esta no lo nota – generalmente al dormir ya que anda
en la oscuridad – lo defeca. Si el insecto está infectado del Tripanozoma Cruzi
esta materia fecal entra en el torrente sanguíneo de la persona picada cuando
esta se rasca, y allí se produce el contagio. Siendo que durante el día se esconde
en los techos de paja, o paredes de barro, perjudica preferentemente a los pobres.
Cuando la enfermedad – llamada de Chagas – llega a su etapa crónica afecta
gravemente el corazón del enfermo produciendo en ocasiones la muerte.
Si los susodichos fondos no
tienen vuelo sino su mirada – idolatrada por los lacayos, debemos decirlo – pobre, si perjudican
particularmente a los pobres de los pueblos, si se ve gravemente afectado el
corazón, si su característica principal es que chupan la sangre de las
víctimas, los enferman y encima los cagan… si son insectos, por más trajes o
sueldos en dólares que cobren o solicitadas que publiquen, si se manejan entre
tinieblas. ¿No es más sensato llamarlos fondos vinchuca que fondos buitre? ¡Nuestro
cóndor no lo merece!
Foto 1. tomada de elliberal.com.ar
Foto 2. tomada de tahucolectivo.blogspot.com
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